El nuevo sistema de previas genera controversias

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Se encuentra vigente un nuevo sistema para la evaluación y acreditación de contenidos previos que busca brindar mejores oportunidades a los estudiantes y mejorar los procesos de aprendizaje. Por Candela Tamaro, Ana Perazo, Amanda Bello 5º COM A

En el Instituto Evangélico Americano el nuevo sistema de previas se implementó con el objetivo de ofrecer a los estudiantes mayores oportunidades de preparación y un acompañamiento más personalizado por parte de los docentes. La iniciativa, a diferencia de la modalidad anterior en la que los estudiantes debían rendir la totalidad de la materia en una fecha, permite rendir contenidos de manera gradual y asistir a clases de apoyo previas al examen. De esta manera se busca mejorar los aprendizajes y la organización del estudio, sin embargo, causó controversias entre alumnos y profesores respecto a su efectividad.

La propuesta se enfoca en una mirada educativa actual, que reconoce que no todos los estudiantes aprenden al mismo ritmo ni de la misma manera. Tanto docentes como alumnos valoran esta innovación, aunque también remarcan aspectos que generan debates y necesitan ser mejorados para que el sistema funcione y pueda sostenerse en el tiempo.

Desde la mirada de los estudiantes, la organización aparece como lo más importante. Una alumna expresó que se siente conforme con la nueva dinámica porque sostuvo que “si sos organizado y planificás el estudio con tiempo, el período alcanza perfectamente”. En su opinión, la clave está en no dejar todo para último momento y aprovechar las clases de apoyo con los docentes, que son fundamentales para aclarar dudas y llegar con mayor seguridad al examen. Para ella, el consejo más importante para sus compañeros es ser ordenados y usar esos espacios de consulta como una herramienta de aprendizaje.

Por parte de los docentes, las opiniones son variadas y reflejan la controversia que genera la nueva modalidad. El profesor Ignacio Chaumont, Coordinador del Departamento de Comunicación, destacó que el sistema es innovador y que permite un trabajo más personalizado: “Antes los alumnos rendían toda la materia sin saber con claridad en qué habían fallado. Ahora podemos focalizar en los puntos débiles de cada estudiante y acompañarlos de manera más consciente”. Sin embargo, también advirtió sobre el riesgo de que la multiplicación de oportunidades genere cierta relajación en el estudio, por lo que considera necesario “buscar un equilibrio que no afecte la calidad del aprendizaje”.

Por otro lado, la profesora Marcela Abraham, Coordinadora del Departamento de Portugués, remarcó que la propuesta acompaña una mirada educativa más inclusiva, al contemplar los distintos tiempos de aprendizaje. Sin embargo, señaló dificultades prácticas: la escasa asistencia a las clases de consulta y la superposición horaria con otras materias. Explicó que, en muchos casos los alumnos perdieron clases regulares para poder asistir a los espacios de apoyo, lo que generó conflictos en el seguimiento de los contenidos actuales. Además, advirtió que la fragmentación excesiva de las materias puede hacer que los estudiantes pierdan una visión global de cada asignatura.

Matías Vanni, Coordinador del Departamento de Ciencias Exactas, aportó que el éxito del sistema depende en gran medida del compromiso del estudiante. Sostuvo que la modalidad es positiva siempre que los alumnos participen activamente, estudien con anticipación y traigan el material preparado a las clases de apoyo. “Si no hay predisposición positiva del alumno, todo el esfuerzo del docente no alcanza. Evaluamos tanto el proceso como los resultados, observando la evolución y la actitud frente al contenido”, explicó. También indicó que, aunque algunas veces los estudiantes deben reorganizar horarios y dejar de lado clases de otras materias, esta flexibilización permite un seguimiento más personalizado y un aprendizaje significativo.

Los profesores coincidieron en que el sistema está bien encaminado aunque todavía se pueden hacer ajustes y por eso se encuentran en contacto y trabajo permanente con el Equipo Directivo. “Hay que seguir trabajándolo, no para dar facilidades que bajen la exigencia, sino para generar mejores recursos organizativos que beneficien tanto al estudiante como al docente”, sostienen en el colegio. Es necesario seguir poniendo en práctica cada ajuste que se piense, poniendo énfasis en fortalecer la obligatoriedad y el aprovechamiento de las clases de apoyo.

El nuevo régimen para la acreditación de contenidos en asignaturas previas representa un cambio significativo en la dinámica escolar. Los estudiantes destacan la importancia de la organización personal y la utilidad de los espacios de consulta, mientras que los docentes reconocen las ventajas de un acompañamiento más individualizado. La diversidad de opiniones en cuanto a su implementación refleja la necesidad de seguir ajustando la propuesta para que cumpla con su propósito: que las previas no sean solo un trámite para aprobar, sino una oportunidad para aprender, siempre que exista compromiso y predisposición del adolescente.

Por Candela Tamaro, Ana Perazo, Amanda Bello 5º COM A

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